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Reabrimos la fábrica

Gusto a poco te deja con las ganas, es definitivamente un golpe bajo al periodismo, es un dolor a los ojos leer estas líneas. Porque el sentido inicial se desvirtuó, porque no respeta, ni al que escribe estas líneas, humildemente desde su silla. Entonces menos te va a respetar a vos, que ni siquiera me lees, o si me lees no me dejas comentarios, entonces me chupa un huevo.
Además leer Clarín también es un dolor de huevos, y miles de boludos lo hacen (como yo).
Por lo cual, ya no hay línea de coherencia, no hay conceptos absolutos que respetar.
Leer Gusto a poco duele mucho, pero es como todo, la primera vez duele, la segunda te va a empezar a gustar, o al menos te vas a acostumbrar como quién se acostumbra a escuchar y tararear las canciones de los Ratones Paranoicos.
Debajo está la nueva nota de Gusto a poco sobre el día de San Patricio. La nota, por cierto, no te respeta. Ni a vos ni a tus ojos.

Pensá en verde...


Mucho verde, mucho verde. Gorras verdes, serpentinas verdes, remeras verdes, cigarrillos verdes, viejos verdes, bares verdes. "¿Es el día de la ensalada?" se pregunta el humilde redactor -mentira, en realidad no se pregunta nada, sólo busca cerveza-.

Y busca cerveza por que es el día de San Patricio, ¿quién carajo es San Patricio?, andá a saber, alguien que murió por la cerveza o a causa de la cerveza. Y repito muchas veces la palabra "cerveza", y hablo en primera persona, y me cago en los putos preceptos periodísticos, si total nadie lee este puto blog.

"Cerveza"... ahora el que habla, el que late, es mi hígado, sabe, ve que hay cerveza cerca y que no le llega ni una gota. Ve que no hay puestos callejeros, que los pubs estan imposibles de entrar y te cobran consumiciones que arrancan desde los treinta pesos.

"¿Y cuál es la consumición?"

"Una Warsteiner de 500", responde el patovica.

Generosos, muy generosos. Todas estas dificultades hicieron que tengamos que caminar tres cuadras en subida para buscar a partir del boca en boca, al "Barón de la Cerveza". Muy argento, obviamente. Kioscos que llevaban botellas a las esquinas, baúles de coches con heladeritas, todo con "Cobani Complicity", salvo un comercio que no habrá coimeado y le estaban labrando un acta. Era un kiosco a oscuras que lo único que tenia en la vidriera era una empanada de carne.

El mercado negro se acabó rápido, y nosotros estábamos demasiados sobrios.

El 109 a Liniers me encontró pagando el boleto a las dos horas de arrancado el día.

Feliz San Patricio, de parte de un pagano sobrio.

Poco (Canción oficial del blog)